martes, 16 de mayo de 2017

Excusas.

Llevo toda la vida inventando excusas y se me da genial. Es demasiado alto, es demasiado bajo, no me gusta la camiseta que lleva hoy, no estoy a su altura, no me convence su pelo. Es más fácil para mí inventar excusas que hacer frente a la realidad, y generalmente, para todos. Es mucho más fácil huir , escabullirte o dejar que pase el tiempo mientras que esperas que pase algo que nunca va a pasar y tú, en lo más profundo de ti, lo sabes. Pero no te atreves,  no te atreves a dar el paso tú, a lanzarte por algo que llevas buscando desde siempre, quizás por miedo al "NO" , quizás por miedo a que no sea lo que tú crees que es o lo que tú quieres que sea, por miedo a sentir que alguien puede hacerte vulnerable .
Las excusas te ayudan a no pasar por situaciones que quieres que pasen de largo pero a las que no eres capaz de enfrentarte , quizás en ese momento o quizás siempre. Las excusas ayudan a perder el tiempo, a dejar pasar las oportunidades, a dejar pasar los cafés y a que se derritan los helados esperando que algún día seas tú la que deje de querer poner excusas.
En la mayoría de las ocasiones, las excusas son el reflejo de nuestras inseguridades, complejos y miedos que hacen que lo único que nos haga sentir bien es recurrir a ellas. ¿Por qué? Porque estamos agusto en nuestra zona de comfórt , porque no queremos reconocer que estamos equivocados,  no queremos reconocer que tirarte sin cuerda es lo que de verdad te apetece , no queremos mostrarnos a plena luz porque una vez que te muestras, es mucho más fácil que te hagan caer.
Pero quizás llega el día en el que ya no quieres poner excusas, en el que buscas cualquier excusa para hablarle o para que te hable él. Llega el día en el que estás deseando mandar a la mierda todas esas excusas , el problema es que no sabes si la otra persona haría lo mismo.


Deja de hacer la tonta, si crees que quieres irte, deja las excusas, vete, empieza de cero en otro sitio, con otras personas y con otra manera de ver las cosas. Deja de creer que no va a salir bien, deja de creer que lo seguro es lo que te hace feliz y asume que lo que de verdad quieres es marcharte.
Está claro que no será fácil, que echarás de menos lo que no te lleves contigo, a quién no te lleves contigo. Pero también es cierto, que es hora de que hagas tu vida, de que te centres en ti y olvides a los demás, de que olvides que te costaría perderles de vista, te costaría no compartir todos los cafés con ellos , porque cada uno comienza a hacer la tuya y tú no puedes quedarte atrás. Normalmente las cosas que más esfuerzo nos suponen hacer, son las que nos hacen más felices.
Las excusas no pueden servirte como base para todo, al revés, todo debe servirte para no tener excusas. Los kilómetros hacen que valores más lo que tienes, a las personas que realmente quieres y echas de menos y a las que prefieres haber perdido de vista. Por eso y más, da el paso, el primer paso siempre cuesta un poco más, no sabes si darlo con la izquiera o con la derecha, quizás te tropieces o te salga mal a la primera, a la segunda o a la tercera pero... ¿No consiste en eso la vida?




No hay comentarios:

Publicar un comentario